Vive sus últimos días la plazoleta Fidela Ascencio, el “parquecito de los enamorados” o “plaza de los antojitos”, como usted quiera nombrarle. Ese espacio que poco a poco se fue llenando de comerciantes, en el transcurso de los próximos 15 días será acordonado y empezarán los trabajos consecuentes de la girola.
Desde hace poco más de un año ya se había anunciado que en un futuro cercano se debía desalojar esta plazoleta para iniciar la excavación para la construcción de algunos espacios más de la girola, como el bautisterio. La cimentación de esta parte tendrá que hacerse de manera profunda, y en ese espacio se colocarán criptas, de cuya venta se financiará el sueño de concluir la girola.
A paso lento, pero avanza el proyecto de la girola
El señor cura Miguel Franco González, párroco del templo de San José, detalló los avances que lleva el proyecto de la girola del templo de San José Obrero.
“Estamos ya terminando lo que es la capillita o el templete de las nuevas criptas, y a la vez estamos tratando de terminar las bases con capiteles para techar el futuro bautisterio. Se está poniendo cantera del arco fajón donde se va a asentar la media bóveda del altar principal, ahí estamos poniendo cantera e ir adelantando las bases para ya techar por completo la girola con el bautisterio”, acotó.
-¿Cómo van los avances debajo de la plazoleta Fidela Ascencio?
-Ahorita tenemos piensos de excavar la suela de la plazoleta para ir haciendo la plancha; la plaza va a estar más amplia, y empezar a acomodar todo lo que se va a tumbar de la parte de arriba, empezar a construirlo en el subterráneo, y donde está el antiguo curato y toda el área junto a la girola que ya todo se va a mover a la parte de abajo que va a ser sacristía, las criptas nuevas, un área de baños comunes y luego un taller y un salón tipo bodega y un auditorio en la planta baja.
-¿Cómo están en cuestión de dinero?
-Estamos trabajando con nuestras pequeñas rifas y la ayuda de algunas donaciones, que es la segunda colecta que se realiza en las misas dominicales y algunos eventos esporádicos que hemos estado organizando es lo que se está haciendo hasta ahorita. Pensamos intensificar un poquito el hacer eventos para recaudar fondos, para terminar pronto la plancha de la plazuela para que ya esté en función por motivos de muchas personas que la utilizan y de alguna manera se sirven de este espacio para la recreación de las familias todos los domingos.
-En su momento, distintos empresarios comprometieron un apoyo económico. ¿Ese dinero ya está en la construcción o todavía no llega?
-Sinceramente el doctor Pablo sí nos apoyó con 100 mil pesos, los dueños de Politubo con una cantidad, Javier López nos ha apoyado en otras maneras, en especie, y hasta ahí. A través de ese tiempo se ha aplicado todo en la construcción de la girola, que es mínimo, pero se ha aplicado.
-El templo del Espíritu Santo se terminó muy rápido, a pesar del tamaño que tiene. ¿Cómo replicar eso aquí?
-Se necesita que todos sintamos que somos parte, que nos cueste trabajo y que pongamos un granito de arena para que valoremos lo que en comunión o comunidad se está realizando. El apoyo empresarial ha sido poco y ha sido más bien con la ayuda de la clase media, de la gente que nos ayuda poco a poquito pero de donde sea. Hay que seguir adelante con esta obra, que es atractiva por la envergadura del templo y que a la vez por el centro de convergencia turístico que es el templo, la afluencia de gente que viene a conocer nuestro templo con motivos tal vez de venir también a conocer una empresa tequilera y hay varios espacios donde el turismo puede recrear sus inquietudes, llevarse una imagen atractiva de Arandas.